Durante las apariciones de La Virgen en Garabandal, España, Ella transmitió 2 Mensajes que pasaremos a analizar, y que adquieren gran importancia y trascendencia a la luz de los eventos actuales.
Primer Mensaje
18 de octubre de 1961
"Hay que hacer muchos sacrificios y mucha penitencia, y tenemos que visitar mucho al Santísimo, pero antes tenemos que ser muy buenos. Y si no lo hacemos vendrá un castigo. Ya se está llenando la copa, y si no cambiamos vendrá un castigo".
Explicación
Hay que hacer muchos sacrificios y mucha penitencia
Es el llamado constante de los profetas. Es el mismo mensaje de siempre, retomado por Juan Bautista y recordado en todas las auténticas mariofanías. Sacrificios del cuerpo, del entendimiento y del alma. Penitencia por nuestros pecados, expiación de nuestras culpas.
Y tenemos que visitar mucho al Santísimo
Reafirma la realidad substancial de la presencia de Jesús en la Sagrada Eucaristía, con todo su cuerpo, sangre, alma y divinidad. Todo amor a Dios que se precie de auténtico tiene que ser eucarístico o no es amor.
Pero antes tenemos que ser muy buenos
Vivir en la Gracia de Dios tiene que expresarse en los dos extremos del amor: a Dios y al prójimo, palpable y visible en la vivencia de las virtudes, en la humildad, generosidad, castidad, paciencia, templanza, caridad y diligencia. Esto significa ser buenos. Con Dios y con el prójimo por amor a Dios. Y llegando al perdón de lo imperdonable y a la oración por los que nos persiguen y nos hacen daño.
Y si no lo hacemos vendrá un castigo
El castigo no es sino consecuencia del desorden, del incumplimiento de la Ley de Dios. El Antiguo Testamento está lleno de ejemplos. Pero ahora la humanidad es más culpable y responsable pues sabe más, conoce más. Tiene a Cristo crucificado, resucitado, a Su Iglesia, a los sacramentos, a Su Madre, que es nuestra.
La copa se está llenando
En el lenguaje bíblico escatológico la copa hace referencia a la Justicia Divina, consecuencia de la Ira de la cólera de Dios que se lee en el Apocalipsis (15,7; 16,1). Los siete ángeles están listos a derramar la copa de la Santa Ira Divina.
Y si no cambiamos vendrá un castigo
El cambio tiene que ser precedido por un sincero arrepentimiento, profunda conversión y cambio de vida total hacia Dios. “He pecado contra el cielo y contra ti”, dice el hijo pródigo (Lc. 15, 18). El Señor quiere oír nuestras oraciones, nuestras súplicas, quiere ver un cambio en nuestras vidas, que nos arrodillemos, de lo contrario el castigo no se podrá evitar, ni en lo general ni en lo particular.
Segundo Mensaje
18 de junio de 1965
La Santísima Virgen comunicó su "segundo mensaje" cuatro años después, hacia el final de las apariciones. Nuestra Señora le dijo a la principal vidente Conchita González, el 1ro de enero de 1965, que el Arcángel Miguel se aparecería el 18 de junio y le daría un mensaje en su nombre a todo el mundo. Por mediación del Arcángel Miguel, Nuestra Señora se quejó de que no se hubiere hecho caso a su primer mensaje y advirtió al mundo que éste sería el último. Dijo la Virgen:
"Como no se ha cumplido y no se ha hecho conocer al mundo mi mensaje del 18 de octubre de 1961, os diré que éste es el último; antes la copa se estaba llenando ahora está rebosando. Los sacerdotes, obispos y cardenales van muchos por el camino de la perdición, y con ellos llevan a muchas más almas. A la Eucaristía cada vez se le da menos importancia. Debéis evitar la ira de Dios sobre vosotros con vuestros esfuerzos. Si le pedís perdón con vuestras almas sinceras Él os perdonará. Yo, vuestra Madre, por intercesión del Ángel Miguel, os quiero decir que os enmendéis. Ya estáis en los últimos avisos. Os quiero mucho y no quiero vuestra condenación; pedidnos sinceramente y nosotros os lo daremos, debéis sacrificaros más; pensad en la pasión de Jesús".
Más allá de que una aparición sea aprobada, se debe difundir y vivir el mensaje, pues es un recordatorio del Evangelio. No hay excusa, pues María pidió que se difundiera su mensaje al mundo. Es difundirlo y es vivirlo y por tanto este sería el último mensaje revelado en este lugar.
Explicación
Antes la copa se estaba llenando ahora está rebosando
El dramático mensaje llega a un mayor paroxismo. Sólo se necesitaron 44 meses entre uno y otro mensaje para que el Trueno de Dios se volviera exigente y mandatorio ante el incumplimiento del pedido. Desde entonces han pasado poco más de 7 semanas de años. La copa está más que rebosada y habrá que esperar lo peor.
Los sacerdotes, obispos y cardenales van muchos por el camino de la perdición y con ellos llevan a muchas más almas
Lo que María dijo en La Salette, Francia en 1846 y repitió en Fátima, Portugal en 1917, así como en otros lugares de apariciones, vuelve y lo dice con toda claridad en Garabandal, es decir, que los ministros de Su Amado Hijo son irreverentes al celebrar los santos sacramentos, que son infieles a su vida consagrada por su amor al dinero, a la búsqueda de reconocimiento y al desenfreno de los placeres. Y así lastimosamente llevan a muchísimas almas a la condenación eterna. Que no haya duda, no sólo son sacerdotes, sino que incluye a obispos y a cardenales de la Iglesia. No todos, desde luego, pero sí muchos, dice la Virgen y esto fue divulgado en 1965. ¿Qué diría hoy de esta situación? Nuestro deber es rezar por ellos, por los sacerdotes, para que sean fieles a su vocación y no se conviertan en aliados del enemigo.
A la Eucaristía cada vez se le da menos importancia
El doloroso mensaje sobre la Eucaristía no hacía en ese entonces alusión a lo que ha ocurrido en los últimos 50 años de la pérdida en el amor, reverencia, piedad, respeto y unción a la Sagrada Eucaristía y al Santo Sacrificio de la Misa. Esto es muy grave pues la desacralización casi total ha entrado en el Templo Santo de Dios.
Debéis evitar la ira de Dios sobre vosotros con vuestros esfuerzos
Una vez más la Madre de Dios repite que la Ira divina pende sobre nuestras cabezas, pero depende de nosotros aligerarla, acortarla y aún cancelarla.
Si le pedís perdón con vuestras almas sinceras Él os perdonará
Dios es infinitamente justo, pero también es infinitamente misericordioso y si le pedimos perdón con sinceridad, sale a nuestro encuentro, nos cubre de besos y hará una gran fiesta, pues “más alegría hay en el Cielo por un pecador que se arrepiente que por 99 justos” (cfr. Lc. 15, 7).
Yo, vuestra Madre… os quiero decir que os enmendéis
María es nuestra madre y sólo quiere nuestra conversión. Nos suplica por ello, lo ha hecho desde que en la cruz Jesús nos la dejó como madre.
Ya estáis en los últimos avisos. Os quiero mucho y no quiero vuestra condenación
Somos libres ahora de actuar y la Virgen nos señala el camino que hemos de recorrer y nos alcanza la gracia para perseverar. Los últimos avisos golpean inexorablemente sobre toda la humanidad y la Iglesia misma: inundaciones, terremotos, hambruna, pestes, enfermedades, manipulación genética, guerras, revoluciones, terrorismo, confusión entre laicos y pastores, indiferencia a las cosas de Dios, crisis familiar, abortos, etc. Ahora se nos deja libres en la voluntad, pero al final Jesús nos juzgará de nuestras buenas y malas obras y hay sólo dos puertas: la salvación o la condenación.
Pedidnos sinceramente y nosotros os lo daremos
María además de nuestra madre es Medianera universal de todas las gracias y Corredentora con Cristo del género humano. Es la Omnipotencia Suplicante y todo lo que le pidamos sinceramente para el bien de nuestra alma nos lo va a conceder. Despreciar el amor y mediación de María sería el mayor y más costoso error de nuestra vida.
Debéis sacrificaros más
No hay gloria sin cruz. Y como dijera el Papa San Juan Pablo II: “No es que el dolor y el sufrimiento sean el mejor camino para llegar al cielo; es el único”.
Pensad en la pasión de Jesús
Al mundo no le interesa en lo absoluto la Pasión del Señor. Muchos ignoraron la película de La Pasión dizque porque no podían aguantar las escenas de sangre. No, es que la Pasión de Jesús golpea la conciencia. Meditar la Pasión es poner en su justa dimensión la gravedad del pecado y al mismo tiempo el Amor de Cristo por el hombre, pues no hay mayor amor que el que da la vida por los demás. Meditar la Pasión de Jesús prepara y fortalece nuestro propio camino que estamos próximos a recorrer, pues “el discípulo no puede ser mayor que el maestro” (Mt. 10, 24) y si hicieron con Jesús lo que quisieron, siendo Él el leño verde, qué no harán con nosotros que somos el leño seco, o dicho en otras palabras, que somos los verdaderos culpables de la actual crisis que se vive en el mundo, y aun peor, en la Iglesia.
Sirvan estas pequeñas reflexiones para conocer un mensaje que la Virgen pidió que se diera a conocer al mundo desde 1961 y recordó esa petición en 1965.
Juicio de la Iglesia
Respecto a Garabandal reina la confusión sobre la posición de la Iglesia. Las mismas niñas predijeron que el mensaje de Garabandal presentaría dificultades para ser aceptado. Pero a los días de hoy no existe un pronunciamiento definitivo de la Sagrada Congregación de la Doctrina de la Fe.
En efecto, la Santa Sede no ha emitido ni publicado ninguna declaración en su nombre, dirigida a todo el mundo católico, sobre los hechos de Garabandal. Nunca ha expresado pública ni oficialmente su opinión sobre estas apariciones contemporáneas en España.
Por tanto, oficialmente, a nivel de diócesis, así como a nivel de Vaticano, "el caso permanece abierto" en espera de reunir nueva información.
La sentencia que en su tiempo emitieron los obispos de Santander fue de que NO CONSTA LO SOBRENATURAL (No Constat de Supernaturalitate) que en el derecho canónico de la Iglesia se traduce en una decisión negativa de carácter provisional, a la espera de nuevos resultados o de la reapertura del caso. Es un “no” abierto a un posible futuro “sí”.
Muy diferente al CONSTA LO NO SOBRENATURAL (Constat de No Supernaturalitate) cuya decisión es un “no” que tiene carácter final y definitivo. Es un “no” ya no revisable.
Todos los artículos de este sitio pueden ser reproducidos, siempre y cuando se cite al autor, Luis Eduardo López Padilla, y la página donde fue originalmente publicado, www.apocalipsismariano.com